Quantcast
Channel: TORNARUGBY
Viewing all articles
Browse latest Browse all 193

De aperturas y épocas

$
0
0
Me cuenta Phil que un esporádico colaborador de esta hoja volandera, dignísimo reporter rugbístico y mantenedor de cuentas varias de twitter relativas a esto del rugby, decía ayer que Byron Kelleher y Carlos Spencer han sido la mejor pareja de medios que conoce. No digo que no. Motivó el mensaje debate con el dueño de la página, me dice. Que le apuntó que los escoceses John Rutherford y Roy Laidlaw, o sus compatriotas David Kirk y Grant Fox o los Springboks Joost VD Westhuizen y Joel Stransky alcanzaron, al menos, su nivel. Puede, no lo niego. Sí digo que no eran comparables los tiempos, aficionados aquellos y profesionales ya los alabados por @RutgerBlume aka Duque Valentino aka Javier Señarís Senra. Y aunque Joost y Joel llegaron a serlo también, sus trayectorias a caballo entre las dos eras geológicas que ha vivido el Ellis Pitch (y aquí hago parodia del dueño, para los poco avisados) creo, con Señarís, que no alcanzan a Byron y Carlos. Para encontrar un igual a Spencer, sólido, creativo, corredor, jugador de esos que alegra ver en ataque, hay que remontarse al brillante suplente de Grant Fox, el croata-maorí Frano Botica, que jugó poco, relegado por la infalible puntería de su rival por el nº 10. Quizás Mark Ella, el australiano, se pueda comparar, pero como tanto Phil como el Duque parecen alérgicos a los Aussies, no lo mencionaron. Yo le vi jugar en la gira de Australia del 84 y os digo que el Grand Slam no fue cosa de Campese ni de Farr-Jones ni de Lynagh (que jugaba de primer centro) sino de Ella. (Ya me miran de reojo los lugareños de este frío norte castellano, que se extrañan de que no atienda al vino y a las tapas que me han servido, que me dicen que me embebo -¿se dice así?- cuando me pongo con estas cosas de galés, pues las batallas que les cuento hacen que todo lo nuestro lo refieran a País de Gales. Mea culpa.) 

Al grano, ni unos ni otros. Ni siquiera Bennett, con lo que fue, y al que citaba Blakeway en ese intercambio de tweets, no.

Gareth Edwards sí, pero faltaba Barry John. Omitir a John cuando se habla de aperturas olímpicos, acepción mitológica, isn't it?, es peor que gritar al pateador cuando inicia la carrera para transformar, o que protestar al ref, o que ser galés y llamarse Davies y jugar con Inglaterra, como aquel apertura-zaguero de los 80. Barry John, el elegante, Barry John, el inteligente, Barry John, apenas 25 caps con Gales y 5 con los Lions entre 1966 y 1972, que nos enseñó el uso de los espacios, la patada oportuna, el arte del contraataque, la finta y el amago, la patada táctica y el control del tempo del partido. Barry John, el apertura y capitán que inspiraba a sus compañeros y les llevaba a su mejor juego; Barry John, el tipo sensato que se retiró para vivir su vida sin ditirambos ni halagos, el día que una fan de Gales le obsequió con una inusitada reverencia ante el mostrador de una sucursal bancaria. 

Pero es cierto que los tiempos no son comparables y que ni el Duque ni Phil lo vieron. Yo sí. Yo lo he visto casi todo.

Barry John con los British & Irish Lions en 1968

Viewing all articles
Browse latest Browse all 193

Trending Articles